Cómo hacer el lavado nasal en los bebés
Cuando tu bebé está resfriado, le cuesta respirar por la nariz como consecuencia de los mocos que se acumulan en la zona nasal. Esto hace que la nariz se llene de mocos y costras que dificultan que tu bebé respire bien, que coma adecuadamente y que pueda dormir. Para ayudar a que respire con normalidad, los lavados nasales son la solución.
¿Qué es un lavado nasal?
Los lavados nasales consisten en la limpieza de las fosas nasales mediante una irrigación con suero fisiológico. De esta forma, se despeja la nariz facilitando la respiración de los más pequeños.
Según la Asociación Española de Pediatría, el suero fisiológico utilizado en el lavado nasal del bebé es el pañuelo de los más pequeños que no saben sonarse bien la nariz. Por eso, los lavados nasales son imprescindibles para mantener en las condiciones adecuadas su nariz.
¿Cuándo se debe realizar un lavado nasal al bebé?
Los adultos se suenan la nariz cuando lo necesitan. En el caso de los más pequeños ese “sonarse la nariz” se hace con los lavados nasales, que se deben realizar cuando se necesite; es decir, no hay una frecuencia determinada. Hay que hacerlo para que el niño se sienta cómodo y respire bien.
Los lavados nasales son de gran utilidad cuando tu bebé está resfriado. El catarro, que es una infección vírica, se manifiesta con tos, congestión nasal, mocos… que hacen que el bebé no respire bien y tenga también dificultad para dormir. Ante esa situación, despejar la nariz de mocos es clave para que el bebé pueda volver a respirar, comer y dormir sin dificultad.
Estos productos ayudarán a respirar a tu bebé cuando tenga catarro:
Frimar Baby Isotónico de Farline *. Esta solución de agua de mar 100 % natural es ideal para la limpieza nasal diaria a partir de los 0 meses. Para su aplicación cuenta con una boquilla anatómica. Una vez retirado el tapón, hay que introducir con mucho cuidado el aplicador en un orificio nasal y presionar la bomba para aplicar el producto. Hay que dejar drenar el exceso de la solución para que puedan salir bien los mocos después de sonarse la nariz. Cuando se haya terminado la aplicación en los dos orificios, hay que limpiar bien el aplicador y volverlo a tapar con el tapón protector. Es importante no compartir el producto con otra persona.
Suero Fisiológico Aposán*. El suero fisiológico está indicado para hacer las irrigaciones nasales de todos los miembros de la familia, tanto bebés como adultos. Esta solución acuosa de cloruro de sodio al 0,9 % se puede aplicar en forma de gotas directamente en la nariz y se puede usar tantas veces como sea necesario.
Fribalm Bálsamo Suave de Farline está recomendado a partir de 0 meses y contiene eucalipto, abeto y trementina, que aportan frescor y suavidad. Se absorbe rápidamente una vez que se ha aplicado con un masaje en el cuello, pecho y espalda.
Mantener un ambiente con una humedad adecuada es importante cuando tu bebé está resfriado. El humidificador de Aposán mejora la humedad relativa de la habitación donde duerme tu bebé. A través de su vapor frío, aporta humedad al ambiente gracias a su alta capacidad de nebulización de hasta 200 ml/hora. Se puede utilizar en habitaciones de hasta 20 m2 y cuenta con un temporizador con autoapagado programable a 1, 2 o 4 horas. Su depósito de 1 litro ofrece una autonomía de hasta 40 horas.
Los aspiradores nasales pueden ayudarte a retirar los mocos de la nariz, pero no se recomienda abusar de ellos, reservándolos para su uso una o dos veces al día cuando haya mucho moco que aspirar. La p era nasal de Aposán te puede ayudar en este proceso, ya que está diseñada especialmente para retirar los mocos de los más pequeños.
Pasos para hacer un lavado nasal al bebé correctamente
Es importante hacer el lavado nasal antes de dormir y de las tomas en los bebés. Con una cantidad de suero fisiológico de entre 1,5-2 ml en cada fosa nasal en bebés es suficiente. Dicha cantidad se eleva hasta los 5 ml en niños más mayores. La jeringa de irrigación nasal de Aposán, en formato de 2 unidades, tiene la punta flexible. Se recomienda su uso con el Suero Fisiológico Aposán* en botella de 500 ml, que es específico para limpieza nasal. Para aplicarlo hay que acostar al bebé con la cabeza hacia un lado. A continuación, se inserta la jeringa en la fosa nasal y se presiona para liberar el suero de la botella. Tras unos segundos, se repite el procedimiento en la otra fosa nasal y luego se limpia la nariz.
Es imprescindible que, antes de su utilización -incluido su primer uso- se lave bien la jeringa y la punta de silicona con agua y jabón, y hay que esterilizarlas en agua hirviendo durante 5 minutos. Después de cada uso, hay que aclarar el producto con abundante agua y secarlo.
Recuerda que parte de los mocos se podrán expulsar, pero otros se los tragará tu bebé; no te preocupes, porque es normal.
Acude a tu farmacia y pregunta por los productos de Farline y Aposán. Tu farmacéutico de confianza siempre está disponible para ofrecerte consejo y recomendarte lo más adecuado, según tus necesidades.
*PRODUCTO SANITARIO. Cumple la normativa vigente de productos sanitarios.
Fuente:
Neti Pot for Babies: Is Nasal Irrigation Safe? Cleveland Clinic.
Lavados nasales. Asociación Española de Pediatría.
Recomendaciones útiles Pediatría "Resfriado común”. Osakidetza.
Elaboración propia.